Esta Nochevieja, como cada noche del año, más de 1.500 farmacias comunitarias de toda España permanecerán de guardia para velar por la salud de los ciudadanos.
En una nota de prensa, el Consejo General de Colegios Farmacéuticos (CGCOF) destaca que miles de farmacéuticos despedirán el año en sus farmacias, cobijados en sus rebóticas, en estado de alerta por si necesitamos algún medicamento o hemos tenido algún imprevisto de salud.
Tratamientos olvidados, indigestiones típicas de estas fechas, síntomas y dolencias menores, pacientes que vienen de urgencias, serán algunas de las demandas de una farmacia en Nochevieja.
Para Jesús Aguilar, presidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos “en noches como esta valoramos aún más la gran labor que desarrollan los miles de profesionales sanitarios que trabajan para cuidar de nuestra salud, los farmacéuticos desde la red de farmacias comunitarias y también desde los hospitales, siempre garantizando el acceso a los medicamentos”.
En el caso de la farmacia comunitaria Aguilar destaca “la confianza, cercanía y accesibilidad del farmacéutico en todo tipo de núcleos de España; como ha confirmado el CIS en un reciente estudio al calificar los ciudadanos el servicio como el más valorado y accesible, más que nunca en días tan señalados como estos.”
En España hay actualmente 22.222 farmacias comunitarias en las que desarrollan su labor asistencial 55.254 farmacéuticos, según los últimos datos del informe “Estadísticas de Colegiados y Farmacias Comunitarias”, que cada año elabora el Consejo General de Colegios Farmacéuticos. Esta cifra sitúa a la farmacia y al farmacéutico como el recurso y el profesional sanitario más cercanos y accesibles de la Atención Primaria.
Consejos para unas fiestas saludables
Desde el departamento de Divulgación Científica del Consejo General de Farmacéuticos recuerdan que en estos días de celebración, después de las comidas copiosas son habituales las digestiones pesadas o dispepsias, que pueden acompañarse por síntomas como dolor de estómago, aerofagia, sensación de hinchazón, retortijones o ardor de estómago.
Además, estos excesos a lo largo de los días se pueden traducir en aumento del peso, con todos los efectos negativos que esto implica.
Por todo ello, se aconseja intentar no excedernos con las comidas y moderar el consumo de alcohol, manteniendo siempre hábitos de vida saludable. Las comidas excesivas e hipercalóricas aumentan el número de visitas a las consultas y a las farmacias por la aparición de problemas gástricos o aumento del riesgo cardiovascular.