El Programa de Prescripción Social y Salud (PPSS), impulsado por la Subdirección General de Addicciones, VIH, ITS y Hepatitis Víricas de la Secretaría de Salud Pública, se ha consolidado como una herramienta clave para combatir el aislamiento social, el malestar emocional y la medicalización innecesaria en el ámbito de la Atención Primaria, según ha informado el Departamento de Salud de la Generalidad de Cataluña.
En el último año, más de 29.000 personas (29.407) han participado en actividades comunitarias a través de este programa, un 16% más que en el año anterior. Según los resultados de la evaluación de casi 3.000 personas, el 64% ha experimentado mejoras en su bienestar emocional y el 41% se siente más acompañada, lo que ha contribuido a reducir la soledad y el aislamiento social.
El PPSS tiene como objetivo fomentar la participación en actividades que mejoren tanto el bienestar físico como emocional, sin recurrir a medicación. Entre las actividades promovidas se incluyen talleres de arte, música, teatro, actividades deportivas como caminatas y yoga, salidas a la naturaleza, así como prácticas de bienestar emocional como mindfulness y gestión del estrés. También se fomenta la participación social a través de voluntariado y grupos de apoyo, contribuyendo a una atención más humana y comunitaria.
El programa también se está expandiendo hacia nuevos colectivos y servicios, adaptándose a las necesidades de personas con problemas de salud mental y adicciones. En colaboración con universidades, se refuerza la formación en salud comunitaria y prescripción social, y se establecen contactos con el NHS del Reino Unido y otras instituciones para compartir buenas prácticas.
La Prescripción Social se está consolidando como una estrategia esencial para reducir desigualdades en salud, evitar la medicalización innecesaria y poner a las personas en el centro de la atención sanitaria.