Un nuevo estudio que examina el papel de la ‘Aspirina’ en el tratamiento del cáncer de mama revela cuestiones críticas relacionadas con la equidad en salud y el envejecimiento que tienen amplias implicaciones para los ensayos de intervención contra el cáncer y otras enfermedades.
Así lo constatan investigadores del Centro Integral de Cáncer Lombardi de la Universidad de Georgetown (Estados Unidos).
El estudio, llamado Alliance, se lanzó después de que los investigadores observaran que los sobrevivientes de cáncer de mama que tomaban ‘aspirina’, como patre de otro ensayo clínico para enfermedades cardiovasculares, vivían más tiempo.
Para confirmar la observación, un ensayo clínico de fase 3 asignó al azar a voluntarias con cáncer de mama no metastásico de alto riesgo para que recibieran 300 mg de aspirina o placebo al día.
El resultado fue una decepción: la aspirina no disminuye el riesgo de recurrencia del cáncer ni mejoró la superviviencia.
No obstante y a pesar del resultado negativo, los proveedores de oncología y atención primaria aún pueden considerar discutir entre ellos y con sus pacientes los posibles beneficios y daños del unos de la aspirina por otras razones.